El fútbol femenino ya vivió diferentes etapas: desde los inicios tímidos y amateurismo, hasta llegar a tener la presencia global actual, con torneos continentales y Copas del Mundo (aunque aún sea con muchos prejuicios y mínimo apoyo, pero eso da para hacer otro post -o varios).
Sin embargo, la historia de las mujeres en el fútbol tiene una época de la que hablamos poco y sabemos casi nada: el período de la prohibición.

“A las mujeres no se les permitirá la práctica de deportes incompatibles con las condiciones de su naturaleza, debiendo, para tal efecto, el Consejo Nacional de Deportes comunicar las instrucciones necesarias a las entidades deportivas del país”.
Así declaraba el artículo 54, del decreto-ley 3.199, publicado el 14 de abril de 1941, que prohibía la práctica de ciertos deportes para las mujeres en Brasil. ¿Cuál es “su naturaleza”? ¿Quién decide si son incompatibles y por qué?
Lo cierto es que, para la época, muchas personas aún creían que las mujeres debían preservarse para la maternidad, que sus cuerpos eran muy frágiles para la práctica deportiva y que el contacto físico que caracterizaba a algunas disciplinas no eran “adecuados” para el cuerpo y los modos femeninos. Inclusive antes de entrar en vigencia la prohibición.
De esa manera, a pesar de no ser citados directamente en el decreto, el fútbol, la halterofilia, el béisbol, las luchas y otras prácticas fueron prohibidas.
La mayor paradoja: se trata del mismo decreto que, durante el gobierno de Getúlio Vargas, “establece las bases organización de los deportes en el país» y crea el Consejo Nacional de Deportes, “para orientar, fiscalizar e incentivar la práctica de deportes en el país” (art. 1).
Ya para el año 1965, por medio de la Deliberación n. 7 del Consejo Nacional de Deportes, se indica expresamente que “no es permitido (a la mujer) la práctica de luchas de cualquier tipo, fútbol, fútbol sala, fútbol de playa, polo acuático, polo, rugby, halterofilia y béisbol”.

Siempre rebeldes
«A pesar de la prohibición, las mujeres continuaron jugando. Solo que sus conquistas no podían ser registradas, ellas no podían aparecer oficialmente en los registros de las federaciones. Con esto, surgió una invisibilización en la historia de las mujeres en el deporte. Ellas estaban, pero no aparecen. Solo que el silencio no significa ausencia”, afirma Silvana Goellner, investigadora de género y educación física de la Universidad Federal de Río Grande del Sur (citada en este artículo).
En esa época surgieron nombres como el de la árbitra Lea Campos, quien fue detenida 15 veces durante la prohibición, Marileia «Michael Jackson» dos Santos, artillera del fútbol brasileño, las jugadoras del Ponte Preta de Jacareí, que se organizaron en 1969 para presionar por el fin de la prohibición y así de equipos en diferentes ciudades se consiguen relatos de las mujeres jugado pelota.
La creación de la Comisión Parlamentaria Conjunta de Investigación (Comissão Parlamentar Mista de Inquérito, CPMI), en 1976 para examinar la situación de la mujer en todos los sectores de actividades fue un primer paso para establecer algunas recomendaciones para la igualdad de oportunidades para ambos sexos en todas las áreas.
Sin embargo, el decreto estuvo en vigente hasta 1979. El fin de la prohibición no cambió la situación de desamparo, prejuicios, falta de reglamentación, de organización y de estímulo que fueron constantes en el fútbol femenino. Apenas en 1983 la modalidad fue reglamentada.
Muchas de las historias y hazañas ocurridas durante esa época permanecen sin ser expuestas ni publicadas debidamente. Conocemos poco de las mujeres que enfrentaron la prohibición para seguir practicando el deporte que amaban.
Además de la pérdida de memorias, también es importante resaltar la falta de inversión y de estructuras en ese período que, probablemente, aún impacta al fútbol (y al deporte) femenino actual.
Museo del Impedimento – Museu do impedimento
*Impedimento, en portugués, puede usarse para referirse a la prohibición o imposibilidad de hacer algo, pero también al offside, o fuera del lugar, en el fútbol.
Uno de esos esfuerzos para intentar llenar el vacío histórico que dejó la prohibición es el libro: “Mujeres impedidas: la prohibición del fútbol femenino en la prensa de São Paulo” (‘Mulheres Impedidas: A proibição do futebol feminino na imprensa de São Paulo’), de la historiadora Giovana Capucim e Silva.
El estudio inició como su caso de maestría, revisando documentos y publicaciones de la época.
Por otro lado, fue presentado el proyecto “Museo del Impedimento”, en asociación con el Museo del fútbol(Museu do Futebol) y Google.
“Pocos meses antes del campeonato (Copa del Mundo 2019), pensamos en qué forma podríamos ayudar a dar luz a la historia del fútbol femenino e inspirar a las nuevas generaciones de niñas a practicar este deporte. Fue cuando, durante nuestras investigaciones sobre el tema, encontramos este capítulo poco conocido, una página en blanco que merece ser escrita: por casi cuatro décadas, entre 1941 y 1979, estaba prohibido para las mujeres jugar fútbol y participar en campeonatos oficiales en Brasil”, comentaron los creadores.
Bajo el lema “si parte de esta historia todavía permanece en blanco, llegó la hora de contarla”, el Museo del Impedimento surgió como una plataforma colaborativa, ya que los usuarios y fanáticos podían enviar imágenes, documentos, relatos y cualquier material para ayudar en la reconstrucción y documentación de ese momento.
“Hoy tenemos el orgullo de presentar decenas de historias que recibió el proyecto Museo del Impedimento”. Después de una curaduría hecha por nuestros compañeros especialistas del Museo del Fútbol, el contenido está exhibido en Google Arts & Culture, con seis exposiciones virtuales con 205 fotos, documentos relatos y artículos periodísticos sobre jugadoras y equipos que desafiaron la ley y continuaron su camino en el deporte. Descubra la colección completa en g.co/museudoimpedimento”.
En otras fronteras
Brasil no fue el único país con este tipo de medidas.
Específicamente, en el caso del fútbol, desde 1921 hasta 1979 fue una época de fuertes bloqueos para los equipos, ligas y torneos femeninos.
Con los mismos argumentos, reforzando que la práctica de este deporte no era adecuada para las mujeres, Inglaterra, Alemania y Francia, para hablar de los casos más notables, también decidieron no permitir a las mujeres estar dentro del gramado.
- Inglaterra: Prohibido desde 1921 hasta 1971 porque “el fútbol no es adecuado para mujeres y no debe ser incentivado”, de acuerdo con la Asociación de Fútbol (The Football Association – FA) en esa época.
- Alemania: Prohibido desde 1955 hasta 1970, alegando sobre las fragilidades del cuerpo de las mujeres y la agresividad del fútbol. La vuelta al fútbol inicialmente fue con condiciones: las mujeres podían jugar solo en clima cálido, no era permitido usar tacos, la pelota era más pequeña y la duración del juego era de 70 minutos.
- Francia: La Primera División de Francia (Femenina) fue creada en 1918. Sin embargo, desde 1932 hasta 1975 el fútbol femenino estuvo prohibido en ese país.
Al igual que en Brasil, las jugadoras se mantuvieron practicando fútbol, a pesar de los riesgos.